Durante años, la logística fue vista como un área operativa, detrás de escena.
Hoy, es el corazón que bombea el ritmo del negocio.
Cuando todo está conectado —producción, e-commerce, puntos de venta, clientes exigentes y entregas en tiempo récord—, la cadena de suministro deja de ser un soporte… y pasa a ser una ventaja competitiva (o una amenaza silenciosa).
Hoy, las empresas que lideran son las que entendieron esto:
– El inventario no es un gasto inmovilizado, es una oportunidad bien gestionada
– La tecnología no es un gasto de IT, es un acelerador de eficiencia
– La última milla no es el final, es el momento más crítico del viaje
– La logística no es un costo, es una palanca de valor
Tip: Si tu operación logística todavía se trata solo de “despachar a tiempo”, estás jugando con reglas viejas en un mercado nuevo.
En RDS trabajamos todos los días con empresas que están rediseñando su logística para estar a la altura del negocio que quieren construir.
¿Tu cadena está preparada para ese rol?